Rafael Conejo Lama
Democracia, la utopía de nuestros tiempos. Y digo yo….
Cuando murió Franco, yo tenía cinco años, y obviamente, viví
una situación que recuerdo muy lejana, el proceso de un cambio que llenó de
felicidad a muchas personas, y a otras una resignación nostálgica sobre una
etapa que se les iba de las manos.
Durante los años que
siguieron, desde 1978, cuando se vota la constitución y empieza realmente un
proceso transicional hacia una Democracia consolidada, se crean realmente las simientes para una
dictadura vigilada.
En 1981, se ve claramente, como hay una sociedad Española,
resignada a ese cambio, un Golpe de Estado frustrado, afortunadamente no tuvo
mayor ECO, que el de la propia historia.
En este Ítem del tiempo se afianza la Democracia, el
sufragio, la participación social.
Y ahora pienso…….que
gran utopía.
Estamos peor que tiempo atrás, hemos cambiado para sostener
a las grandes empresas especuladoras, financieras y bancarias, que nos han
llevado a un modelo de crisis insostenible para el bienestar común y con una perspectiva
negativa para la recuperación.
La culpa no es de todos, pero hemos participado en ella.
Hemos participado en la medida que nos dejamos influenciar por la convicción de
una vida mejor, con más posibilidades, la verdad que supieron vender, y
nosotros no supimos comprar, lo hicimos, por la genética hereditaria de lo
descrito en estos párrafos, salir de un proceso de necesidad social y
convertirnos en un modelo de progresión.
La Democracia
Utópica, que rodea nuestra existencia, porque claro, no deja de ser una
Democracia, que al menos deja expresarnos, y que obviamente por algún motivo
nos condiciona la libertad al mismo tiempo de vivir esclavos de unas leyes que
nos perjudican más allá de lo constitucionalmente establecido.
Y digo yo, que la Carta Magna, nos da derechos fundamentales
y obligaciones, que la leyes parecen no respetar, y digo yo, por que dichas leyes contradicen la
primera y fundamental de ellas…
Por ejemplo, derecho a una vivienda digna, derecho y deber
de trabajar, y aquí me paro, ya que estos dos puntos de la Carta Magna dan para
escribir la utopía más grande que nos podamos imaginar en referencia a los
acontecimientos que se están viviendo en nuestros días.
Los desahucios, el paro, la corrupción, la ambición de
varios partidos condicionados por la banca para controlar y tener más poder,
para enriquecerse….
Es digno de cualquier película que narra las peripecias de
los tiempos de Locksley, en los que la
sociedad era esclava del Reino….
También, y es una realidad social, hemos despertado,
reaccionado, al menos algunos, para que todos tengamos una oportunidad de
refrendar lo que es de Justicia.
Nuestras casas, Nuestros Derechos Fundamentales, y sobre
todo que no abusen de ello con toda la impunidad de esta Democracia Utópica, ….que ni nombrar
se merecen, por que harían que colapsáramos las palabras de la descripción y la
riqueza de Vocabulario libre y estructurado, por el cual, nuestra rebelión social
se está llevando a cabo.
Y digo yo, deberíamos seguir luchando por la palabra, sin
asociarnos a Sindicatos, ni partidos, que están manipulados y corruptos, que
viven de mi dinero, y de vuestro dinero, para pisotearnos y humillarnos.
Pero la verdadera libertad diría Miguel de Cervantes en el
Quijote:
La
libertad, Sancho, es uno de los más preciosos dones que a los hombres dieron
los cielos; con ella no pueden igualarse los tesoros que encierran la tierra y
el mar: por la libertad, así como por la honra, se puede y debe aventurar la
vida.
Por eso debemos reivindicar que verdaderamente nos
representen en un Parlamento Social, con
verdades cercanas, con la realidad al frente de la necesidad del Verdadero
Ciudadano, el de a pié…..
Y digo yo, democráticamente,
que ya está bien de esta Utopía.
Os dejo una Rosa a
la esperanza …..
Por Rafael Conejo Lama.